Si hay un estado que me aterra, es el Estado 31: «no querer volver a casa» 
Significa que cualquier lugar es mejor que donde reposa tu cama, donde tienes algo de comida en la nevera y un par de champús en el baño. Un sitio que no es hogar, ni refugio, sino unas paredes y un techo que se te antojan indiferentes.
El Estado 31 significa que cualquier lugar fuera es mejor y que cuando estás cansada de caminar y coges el camino de vuelta, todo resulta tedioso y pesado. Y cuando cruzas el umbral de la puerta y ves el interior oscuro y los mismos muebles que odias y la misma mancha en la pared que odias y la misma distribución que odias, algo se cae.
Y eres tú. Regresando a la mazmorra una vez más.